Lo que creamos ser, en eso nos convertimos, los pensamientos engendran sentimientos y estos mueven a las acciones. La que tiene una visión de si misma de confianza, rendirá al máximo de su capacidad; no así la insegura, que carece de esa confianza, esto explica porque algunas personas llenas de talentos fracasan, mientras que otras sin tantas capacidades, triunfan.
Para tener un sano concepto de nosotras debemos conocernos como la maravillosa obra del más extraordinario artista y aceptar su genial diseño, donde hay áreas que no podemos cambiar, porque tienen un propósito muy especial, que al relacionarnos con el artista entendemos y terminamos agradeciendo.
- AREAS INMODIFICABLES
- Apariencia externa, que no aceptamos cuando nos estamos comparando con otros según los estándares de belleza, que varían de pueblo a pueblo, por ejemplo una mujer obesa es considerada en algunas culturas como la más bella y una delgada como falta de gracia. Por no recocer que lo externo es pasajero, mientras lo interno en lo que perdura, claro esta que debemos tener atención no obsesión a nuestra apariencia. Sal. 139:15-16, Is. 45:9-10
- Habilidades y talentos, ciertamente hay algunos más vistosos que otros, pero aquellos que son menos sobresalientes al ser útiles terminan asiendo valorados. 1 Cor. 12:22
- Linaje o herencia ancestral, avergonzándonos de nuestros padres, por no entender que son instrumentos sagrados al ser usados por las manos de Dios para formarnos. Sal. 139:13
- Herencia social, nuestro lugar de nacimiento, algunos pretender haber nacido en grandes ciudades o añoran otras ciudadanías, sin entender que aún esto es para manifestar la gloria de Dios Juan 1:46
- MANIFESTACIONES DE FALTA DE AUTO ACEPTACION
- Preocupación obsesiva por la apariencia externa
- Le cuesta valorarse en la medida justa, se menos precia o menos precia a los demás
- Insensibilidad ante las necesidades de otros
- Perfeccionismo, tratando de ganar aceptación y aprobación
- Comparación injusta con los demás, al comparar fortalezas de otros con debilidades propias
- No aceptar la autoridad de las demás personas, por percibirlo como una humillación o signo de debilidad
APLICACIÓN A NUESTRA VIDA
Al visitar un museo muchas obras no son comprensibles, a menos que se conozca al artista y su técnica, solo el ojo “educado” aprecia la excelencia de la obra, y la valora, por eso en las subastas las obras que certifican, (no si bonitas o son del gusto de la mayoría), sino que son obra de un gran artista son las más costosas.
Nuestro valor no viene del concepto de otros, ni siquiera del propio, sino del artista que nos diseño y nos formo.
FUENTE: MUJER CRISTIANA HOY
No comments:
Post a Comment